La TRA permite a las personas, gracias al estado de hipnosis no profunda en el que se encuentran, que las supraconsciencias afloren sanando las emociones, esta supraconsciencia posee una sabiduría ancestral inherente al ser humano que conoce lo que es bueno y lo que no para nosotros, el paciente, al revivir experiencias pasadas, sentirá la certeza de saber dónde se encuentra la solución a su problema, la curación emocional se produce gracias al diálogo que se establece entre la razón y la emoción.

En el transcurso de la terapia, el paciente estará consciente en todo momento y recordará siempre lo acontecido durante las sesiones.

Es imprescindible, de hecho, que el paciente no entre en estado de hipnosis profunda, así es como reviviendo emociones dolorosas de su pasado podrá, siendo quien es ahora y con el desarrollo de su razón que le han permitido los años, ayudarse a sí mismo.

Es de recibo señalar que la TRA es beneficiosa para todo tipo de personas, se usa en casos de diagnóstico psicológico, enfermedades físicas o simplemente en personas que tengan la inquietud de ahondar en su psique para mejorar aspectos de sus vidas.