TERAPIA FLORAL. FLORES DE BACH
¿QUE ES LA TERAPIA FLORAL?
Se trata de una terapia bioenergética emocional.
Las Flores de Bach, a las que indistintamente llamamos también esencias, remedios o preparados florales, nos ayudan a entender como actuamos y porque lo hacemos de un modo concreto, a comprender nuestras emociones y a conocer poco a poco quienes somos, saber dónde estamos en nuestra vida independientemente del ámbito en la que se desarrolla, a nivel personal, social, laboral, espiritual…
El uso de flores como remedios se remonta a la antigüedad, cuando el hombre tomaba simplemente de la naturaleza sus plantas para curarse. Si bien la búsqueda de una sustancia básica de vida es ancestral, ya lo trabajaban los hombres del neolítico, sumerios, egipcios, griegos, chinos, hindúes, olmecas, y demás cullturas precolombinas, etc; pasando por Hipócrates, Galeno, Paracelso, Hahnneman, Steiner, Bach, han buscado el uso no sólo bioquímico de las plantas, sino también energético.
En 1966, Cleve Backcter, experto norteamericano en exámenes con el polígrafo, jugando, conecto su galvanómetro con la planta de Filodendro que tenía en su oficina. Para ver qué clase de reacción podía registrar., decidió mojar las hojas en el café caliente que tenía en su taza. Como no hubo ninguna reacción empezó a pensar en una amenaza más seria para la planta y comenzó a quemar sus hojas con un fósforo, el galvanómetro se volvió loco. Las reacciones que vio esa noche en su máquina derivaron en cientos de otros experimentos que sirvieron para probar que las plantas tienen capacidad de sentir estímulos externos, reaccionar ante ellos; en definitiva capacidad de pensar.
Desde 1976, la OMS (Organización mundial de la salud), recomienda a sus estados asociados la aplicación de medicinas alternativas, entre ellas la terapia Floral Bach. En este sentido la OMS, publicó en 1983 un estudio dirigido a las administraciones sanitarias de sus estados miembro, donde recomienda explícitamente la terapia del Dr, Bach (“Medicine traditionnelle et couverture de soins de santé”, pág 162, OMS. Ginebra). Declarandola de utilidad pública.
El uso de flores como remedios se remonta a la antigüedad, cuando el hombre tomaba simplemente de la naturaleza sus plantas para curarse. Si bien la búsqueda de una sustancia básica de vida es ancestral, ya lo trabajaban los hombres del neolítico, sumerios, egipcios, griegos, chinos, hindúes, olmecas, y demás cullturas precolombinas, etc; pasando por Hipócrates, Galeno, Paracelso, Hahnneman, Steiner, Bach, han buscado el uso no sólo bioquímico de las plantas, sino también energético.
En 1966, Cleve Backcter, experto norteamericano en exámenes con el polígrafo, jugando, conecto su galvanómetro con la planta de Filodendro que tenía en su oficina. Para ver qué clase de reacción podía registrar., decidió mojar las hojas en el café caliente que tenía en su taza. Como no hubo ninguna reacción empezó a pensar en una amenaza más seria para la planta y comenzó a quemar sus hojas con un fósforo, el galvanómetro se volvió loco. Las reacciones que vio esa noche en su máquina derivaron en cientos de otros experimentos que sirvieron para probar que las plantas tienen capacidad de sentir estímulos externos, reaccionar ante ellos; en definitiva capacidad de pensar.
Desde 1976, la OMS (Organización mundial de la salud), recomienda a sus estados asociados la aplicación de medicinas alternativas, entre ellas la terapia Floral Bach. En este sentido la OMS, publicó en 1983 un estudio dirigido a las administraciones sanitarias de sus estados miembro, donde recomienda explícitamente la terapia del Dr, Bach (“Medicine traditionnelle et couverture de soins de santé”, pág 162, OMS. Ginebra). Declarandola de utilidad pública.
